En marzo de 2023, debido a la gran crisis provocada por la corrida bancaria de Silicon Valley Bank (SIVB), se generó incertidumbre respecto a la estabilidad financiera de los bancos regionales. En una medida polémica, las autoridades decretaron la protección de todos los depositantes, calmando los ánimos en el sector y evitando la propagación de la crisis, no sin antes provocar un colapso en el precio de las acciones relacionadas a la banca regional de Estados Unidos, que intenté aprovechar con limitado éxito.
Junto con estas medidas, una intervención que causó sorpresa fue la de Signature Bank, un banco de New York centrado en clientes ricos y criptomonedas, debido a un retiro de 10 mil millones de dólares por parte de sus depositantes, una corrida bancaria. Posterior a ello, se procedió a vender sus activos de alrededor de 110 mil millones de dólares a otros bancos y empresas.
Una porción de estos activos, 38 mil millones de dólares, fueron vendidos a otro banco regional, New York Community Bank por 2 mil 700 millones de dólares. Estos activos incluyeron préstamos comerciales e industriales. Es aquí donde empieza nuestra historia. Esta adquisición parecía un negocio redondo, pero nada es como parece.
ÉXITO INICIAL
New York Community Bank al momento de la compra tenía una capitalización de mercado de 6 mil millones de dólares. Esta empresa como inversión desde su Oferta Pública Inicial ofreció resultados decentes hasta antes de la gran crisis financiera, tras lo cual estuvo en caída constante, hasta generar retornos de 3.5% anuales en 30 años. Con dividendos hubiese obtenido resultados algo mejores, un 8.6%. Esta empresa no ha sido una gran inversión. Se esperaba que esta adquisición se pudiera mejorar esa situación.
A raíz de la noticia de esta adquisición, fue tomada de forma positiva por el mercado, subiendo alrededor de 30% al día siguiente de informada, lo que provocó que durante el mes de marzo las acciones subieran un 2%. Esto contrastaba enormemente con la situación que afrontaban los bancos regionales, que durante ese mes se desplomaron 30%.
Esta situación se mantuvo durante el 2023, donde NYCB se mantuvo positivo, generando un retorno de 27%, mientras que los bancos regionales cayeron un 7%. Parecía que todo iba bien.
ALEGRÍA DE CORTA DURACIÓN
En este 2024, NYCB se encuentra con una caída de 63%, mientras que la industria bancaria regional ha subido 1%. Con esto, se borró todas las ganancias ocurridas desde el inicio de la crisis bancaria regional de 2023 y ahora se encuentra en peor situación que su industria, como se aprecia en el gráfico:
¿Qué pasó? En la presentación de resultados anuales del banco, sorprendió negativamente al revelar pérdidas que el mercado no esperaba. Se debió a una provisión para préstamos incobrables relacionados a oficinas comerciales, que han terminado afectados por el coronavirus y el trabajo remoto. Las acciones cayeron casi un 40%, generando muchos temores de revivir la crisis de banca regional del año pasado. Esto ocurrió el 31 de enero.
Esto era el preludio de lo que se avecinaba.
EL DÍA D
En torno a la incertidumbre que rodeaba al banco, el 6 de marzo, lo que parecía ser un día tranquilo con una ligera disminución del precio de la acción en bolsa, empezó a torcerse aproximadamente al mediodía, después de que las noticias revelen que NYCB se encontraba en búsqueda de inversionistas para realizar una inyección de capital al banco en apuros.
Esta clase de noticias son las peores que se pueden escuchar, porque indica que el banco no cuenta con la capacidad de asumir sus obligaciones. Una situación similar se vivió en 2023 con Silicon Valley Bank, que lanzó una Oferta Pública de acciones, lo cual fue contraproducente, ya que generó pánico y su posterior desaparición.
Con esta información, se provocó una caída cercana al 50%. Una caída de estas proporciones fue el detonante de otro banco como el First Republic Bank, intervenido posteriormente por las autoridades.
El giro se dio unas horas más tarde, con el anuncio por parte de NYCB de una inyección de capital de mil millones de dólares por parte de un grupo de inversionistas, entre los que se encontraba un vehículo de inversión del ex secretario del Tesoro Steve Mnuchin, entre otros.
Esta noticia tranquilizó a los inversores, ayudados por la suspensión de la cotización de las acciones del banco. No significó que fuese tranquilo. Las acciones volvieron de la suspensión con un aumento del 30% sobre el precio de cierre ¡del día anterior!, para luego estabilizarse al cierre con una ganancia del 7%.
Así fue el día para estas acciones:
Vaya día para ser accionista de NYCB.
¿RECAUDAR O NO RECAUDAR?
En el apartado anterior, mencionaba que un banco que busca inversores para un aumento de capital es una mala noticia, toda vez que genera desconfianza en el mercado y puede provocar corridas bancarias. Esto no sucedió con NYCB. Veamos posibles explicaciones.
La afirmación anterior no es una verdad absoluta. El caso de Silicon Valley Bank fue emblemático porque sucedió de esa forma. Pero como todo, hay matices. No es lo mismo recaudar capital que intentar recaudar capital:
Recaudar capital: El banco ha conseguido inversionistas que están dispuestos a solventar el problema de liquidez mediante la inyección de dinero fresco. Todo esto se hizo en silencio para evitar generar pánico en los mercados y, sobre todo, en los clientes (depositantes).
Intentar recaudar capital: El banco está en conversaciones con inversionistas para recaudar dinero, pero aún no hay nada confirmado. Los mercados interpretan esto como un fracaso en la búsqueda de financiamiento. Lo que más detestan los mercados es la incertidumbre, por lo que se genera pánico y, por lo tanto, corridas bancarias.
En el caso de New York Community Bank, las noticias salieron sin ninguna confirmación, por lo que se explica la caída inicial. Nos encontramos en el segundo caso. Posteriormente, la noticia de la inversión nos puso en el primer punto, evitando el colapso del banco y quizás evitando otra crisis. Esto se debe a que uno de los principales inversores es una persona vinculada con el poder como lo es un exsecretario del Tesoro.
Un banco debe tener cuidado en comunicar sus acciones, ya que puede generar una reacción negativa hacia ellos. Recordemos que los bancos son insolventes per se, porque el dinero de los depositantes se puede retirar en cualquier momento, pero ese dinero se encuentro invertido en activos de largo plazo como préstamos, que no pueden venderse con facilidad. Para evitar el caos, debe proyectar confianza, porque son los cimientos de los bancos con lo cual operarán sin problemas.
PENSAMIENTOS FINALES
Invertir no es una actividad sencilla, sobre todo afrontar la volatilidad es una de las principales dificultades que un inversor debe aprender para desarrollar rendimientos atractivos.
Ya es difícil afrontar caídas que toman tiempo, por ejemplo, durante un año o más y esperar su recuperación. Este caso la caída fue pronunciada (50%), pero la recuperación ocurrió en el mismo día. Un inversionista que vendió su posición por temor a una corrida bancaria o una pérdida permanente de su capital, se llevó una sorpresa al ver que terminó con una ganancia de 7% ¡ese mismo día!.
La lección aprendida aquí es que no debemos desesperarnos por un gran movimiento a la baja de nuestras acciones, porque el mercado suele ser impredecible. Este caso extremo lo demuestra.
Gracias por leer.